Se trata de la Plaza Onésimo Leguizamón, ubicada en el barrio porteño de Mataderos, la que se convirtió en un polo de calistenia.
La plaza se encuentra en Fragata La Argentina y Ercilla, del barrio de Mataderos, que el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, reacondicionó y lo transformó en un polo de calistenia, para promover la práctica de esta disciplina entre los vecinos.
Los trabajos incluyeron la instalación de barras y estructuras específicas para que los vecinos puedan realizar ejercicios como dominadas, fondos y otras rutinas características de este entrenamiento físico.
El objetivo fue reforzar el entorno de entrenamiento gratuito, al aire libre y de bajo impacto, en línea con los beneficios que ofrece la calistenia.