Te traigo en esta oportunidad, una imagen ¡tan gráfica como contundente!
Para que habilites otra frecuencia que se encuentra disponible en tu “caja de pandora”.
Cuando hablamos de la Energía del Miedo, que es tan vital como nuestra propia existencia, no pretendo anularlo, sino correrlo a un lado. Es decir que esté, pero que no estorbe; que se manifieste pero no que no invada; que se haga presente pero no domine. El miedo es necesario para poner filtro a las situaciones de nuestro devenir cotidiano, es nuestro policía del impulso, y está muy bien que así sea. Pero si le damos más entidad y protagonismo del que amerita… ¡nos quedamos inmóviles, impávidos!
La reacción al miedo no es inocente, se activan sustancias químicas que causan la generación de cortisol, una hormona que aumenta la presión sanguínea y el azúcar en sangre y suprime el sistema inmunitario. Además de dejarte en estado ¡shock!
Ahora bien que sucede cuando decidimos corrernos de sintonía, como cuando cambiamos la radio que estamos escuchando porque nos cansamos de las noticias que transmite, de la música que está circulando o porque el locut@r utiliza un tono que nos resulta desagradable… activamos una nueva frecuencia. Cuando verdaderamente dejamos que el amor tome la posta, nos magnificamos… el amor en todas sus versiones, empezando por el propio y luego replicando y salpicando con gotas de amor todos los escenarios de tu vida.
La Energía del Amor libera dopamina, serotonina y oxitocina, es por ello que cuando nos enamoramos de nuestra propia existencia nos sentimos excitados, llenos de energía y nuestra percepción de la vida es optimista y superadora.
¿Cuál es la que prevalecerá en tu día? me dirás vos.
La que decidas alimentar!, te responderé yo.
Licenciada Noelia de la Fuente.
Instagram: @delafnoe
